Este miércoles (3 de abril), Chipiona levantará el telón de una de sus fiestas más populares, la Feria del Moscatel. Evento que, de la mano de la música, el baile y la buena gastronomía local, se prolongará hasta el domingo (día 7) y que, un año más, rendirá homenaje a su vino de referencia, el moscatel.
Y es que, asomada a ese privilegiado rincón del que partieron algunas de la grandes conquistas, la localidad se ‘debate’ entre la salada claridad de su mar y la fertilidad de su tierra. ‘Pulso’, mágico y milenario, que marca su historia y cuyo excepcional maridaje da origen a productos inigualables.
Frutos como sus variadas y exquisitas hortalizas, esas que encuentran acomodo en las despensas más exigentes de estas y otras tierras, y que son ‘regadas’ con vinos centenarios, con inimaginables moscateles, ilustres embajadores de ese triángulo mágico llamado Marco de Jerez.
Vino del que el historiador local, Juan Luis Naval, dijo que “es peculiarísimo de Chipiona. Se da en sus tierras pero no en otras, que aunque similares aparentemente, no producen el vino con ese perfume delicioso y tentador que el de aquí. Tal vez el clima, la naturaleza del terreno, la técnica utilizada, los años de experiencia. Lo cierto es que, al menos hasta ahora, de los vinos moscateles que se crían en España, ninguno tiene este perfume característico, delicioso y tentador de los de Chipiona”.
Moscateles que podrás degustar estos días tanto en la feria como si te acercas a algunos de sus templos, como es el caso de la Cooperativa Católica, en la que se elabora uno de los más afamados, ‘Los Madroñales’, que cuenta con un gran número de premios nacionales e internacionales.
Asimismo, te invitamos a visitar su bodega más antigua y una de las de mayor solera del Marco de Jerez, Bodegas César Florido, en la que desde hace siglos se elaboran exquisiteces como sus moscateles Dorado César Florido, Especial César Florido y Pasas César Florido, reflejos de una forma muy familiar de entender la viña
