Tras recorrer la franja de los acantilados de Barbate (por el espectacular sendero que va desde Los Caños de Meca hasta la playa de la Hierbabuena), el cuerpo nos pide una buena tapa. Estamos en tierra de almadrabas, así que nos hemos decantado por una sabrosa Mojama de Barbate, un bocado de origen milenario (época fenicia), de fácil elaboración (prima el producto) y que concentra ese sabor y textura tan típicos de los salazones.
Sal gorda, tradición y paciencia son los pilares de un bocado que se elabora con la parte menos grasa del atún, del rojo: el lomo.