Como se suele decir, a nadie le amarga un dulce y menos aún en estas fechas de Tosantos, en las que las confiterías de la provincia de Cádiz se convierten en lugares de obligada peregrinación en busca de bocados, sobre todo, de gran tradición.
Como se suele decir, a nadie le amarga un dulce y menos aún en estas fechas de Tosantos, en las que las confiterías de la provincia de Cádiz se convierten en lugares de obligada peregrinación en busca de bocados, sobre todo, de gran tradición.