Después de varios días de intensas lluvias derivadas de la potente DANA que se instaló en el Golfo de Cádiz, el agua ha vuelto a brotar con fuerza en la Sierra de Cádiz. Caños secos durante meses, en algunos casos años, han vuelto a expulsar agua como hacía tiempo ya que no se recordaba.
En la Sima de Villaluenga, por ejemplo, durante la jornada de jueves se estaban liberando más de 2.398 litros por segundo. Otras zonas de la provincia también vivieron fenómenos parecidos. Y lo más importante, los pantanos han recogido suficiente agua para varios meses de suministro, tanto para el consumo humano como para regadío.
En Ubrique y sus alrededores también se podía apreciar agua donde hacía muchos meses que no se veía ni gota.
El pantano de los Hurones es otro de los grandes beneficiados de estas últimas lluvias.